“Víctima
y victimario dañados por una sociedad que vulnera derechos, que no
garantiza lo básico, que excluye, que mal educa con una escuela
podrida por la selección, el mérito y la estandarización. Un
modelo de sociedad clasista, individualista e intolerante que está
destruyendo día a día lo poco que nos queda. Se llama capitalismo
neoliberal, conservador, patriarcal y oligárquico y es
administrado por sus propios dueños, o por sus empleados en versión
fanática-integrista o en versión progre...”.
(José Miguel).
“...Necesitamos
ver más allá del simple acto...”.
“...Wow,
él es Sebastián, lo conocí hace años cuando él era sólo un niño
que quería olvidar su entorno aunque fuera unos minutos.. Vivía a
un lado del galpón que administré y fue centro deportivo cultural,
incluso gracias a él tuvimos luz al comienzo. Mis amigos y yo vimos
su situación y tratamos de ayudar y apoyar... Es un niño abandonado
de un padre ausente y una madre alcohólica. Muchas veces lo vi
llorar porque trataba de levantar a su madre que yacía tumbada en
cama, producto del alcohol. Varias veces ni siquiera tenía para
comer... Le enseñamos a andar en Skate... A hacer deporte a tocar
instrumentos... Le dimos ropa y hasta comida... Él estaba cambiando
y se veía una persona que sí quería salir adelante... Un día nos
cerraron ese sitio y no se pudo continuar el proyecto... Para la
Municipalidad ya no eramos más que jóvenes arriba de una
patineta... A Sebastián lo dejamos de ver como antes lo hacíamos
hasta que en los años lo volvimos a ver... Pero era otro... El vivía
en la calle... Se había vuelto punk y andaba ya metido en temas de
violencia... Él solo trataba de encajar en un grupo... Ser aceptado
y sentir el cariño o apoyo que nunca tuvo en su familia...
Luego la
calle... La droga... El vicio lo llevó a otros caminos... Como el que
vemos hoy! NO JUSTIFICO SU ACTUAR pero a veces tenemos que ver más
allá de sólo el acto y darnos cuentas que esa persona homofóbica y
delincuente como lo tachó la sociedad no es nada más que otra
víctima de una vida injusta, una vida a la que él no pidió
venir... Él sufrió la discriminación, la violencia y el abandono
alrededor de toda su vida... Y paradójicamente son los mismos hechos
de violencia y discriminación los que le pasaron la cuenta y hacen
que vaya a la cárcel.
NO digo
que no merece ir a la cárcel... Cada acción tiene su reacción y
consecuencia...
Pero
insisto, necesitamos ver más allá del simple acto... Creo que acá
todos son víctimas de una u otra forma...”.
Ozkar
Peralta Martínez.
Santiago,
11 de marzo de 2019.